Uno de los temas más recurrentes en las redes sociales de padres de la familia y en la población general es el llamado “Bullying”, o “Acoso escolar”. Esta problemática social ha sido encabezado de cientos de miles de titulares de noticieros en todo el mundo, y hay que decir que con justas razones. Sin embargo, ha llegado ese momento donde, de tanta información mediática no sabemos realmente lo que significa este término, al punto que, si le preguntamos a una persona sobre este tema contestará automáticamente diciendo que “El bullying es violencia escolar”, lo cual es cierto, pero ¿Qué hay más allá de esto? ¿Cómo podemos ayudar? El día de hoy hablaremos de aquellos aspectos que pasan desapercibidos a la hora de hablar del acoso escolar.
¿Qué es el Bullying?
El bullying es el término que nos refiere a la violencia producida en el ámbito escolar, la cual puede presentarse de maneras muy variadas y por tanto el rango de gravedad igual es variable (pues pueden ser hasta simples burlas y provocaciones hasta gritos, insultos e incluso golpes). Las dos partes que conforman este ciclo de violencia son: El acosador (O bully) y el acosado (o bulleado);
¿Quiénes pueden ser los bullies?
Aunque en las películas, series y animaciones el (o los acosadores) sean representados como estudiantes de la misma escuela del acosado, esto no siempre es así, pues hay casos donde la misma plantilla docente (o trabajadores afiliados) del colegio incurra o fomente prácticas violentas entre los mismos alumnos.
Antiguamente cuando se quería retratar la vida escolar en algún medio de comunicación era de lo más común ver cómo profesores imponían grandes castigos corporales, verbales o mentales a sus alumnos, los cuales eran llevados a cabo en la vida real y en ocasiones apoyados por los padres de familia con el argumento de que “Con castigos duros el niño aprenderá a comportarse”. La representación más clara de lo anterior es la siguiente:
¿Recuerdan cuando de chicos veíamos en animaciones y películas como el alumno con mal comportamiento era castigado con estar en el rincón o aislado de todos sus compañeros con un sombrero alargado? ¿O bien, recuerdan la representación típica de un profesor, con regla en mano, dispuesto a imponer respeto a base de unos cuantos golpes? Aunque en la vida real no todo es así, lo cierto es que castigos de esta índole se han impuesto con el paso de los años; por tanto, aunque poco se tome en cuenta, debemos saber que hablar de bullying de cierta forma es hablar de factores culturales de nuestra sociedad. Ahora mismo, todo lo anterior es englobado en la frase “Enseñanza a la antigua o de la vieja escuela”. Sea como fuere, es una forma de acoso poco regulada en décadas pasadas y debe ser prevenida en la actualidad.
¿Sé detectar la violencia?
Centrándonos en la violencia escolar entre alumnos: Es la forma más recurrente de acoso escolar, la más prevenida y la más hablada en medios masivos, pero a la hora de la hora ¿Sabemos detectar cuándo unos pequeños juegos entre compañeros se vuelve un gran peligro para la salud?
Hay que tener en cuenta que el límite no es igual para todos, y depende de la persona y del grupo con quien estemos involucrados. Pudiera ser que alguna acción que para algunos sea muy molesta, para otros sea vista con buenos ojos. No obstante, existen algunas normas generales para la detección del bullying:
- Dolor emocional: Cuando algo hiere nuestro sentir, es una de las señales más claras que hay de que un simple juego se ha convertido en algo más, mucho ojo.
- Cometarios y apodos: Tal ves en la época escolar te hayan puesto algún apodo: ¿Qué tan cómodo te sentiste con él? ¿Por qué te lo pusieron? ¿Resultó ser desagradable?
- Golpes e insultos: Por norma general, en ningún grupo se puede insultar o golpear a una persona de manera natural.
- Define tus límites: Aunque estas recomendaciones suenen un poco vacías, cobrarán sentido cuando delimites las actitudes válidas e incorrectas que deben de tener los demás contigo, los puntos anteriores podrían ayudarte a hacerlo si aún no los tienes muy claros.
En artículos posteriores hablaremos más de esta gran problemática. ¿Qué piensas?