Complejo de Edipo
El complejo de Edipo adquiere su nombre tomándolo del mito griego de Edipo rey, quién sin saberlo mató a su padre y se casó con su madre.
Dentro del mundo la de la psicología y el psicoanálisis el complejo de Edipo hace referencia a la atracción sexual que el niño desarrolla hacia su madre durante la etapa fálica, al mismo tiempo el niño ve a su padre como un rival o competidor por el afecto de su madre.
El niño presenta actitudes mezcladas o ambivalentes, ya que si bien, el padre es un modelo a seguir, por lo cual es respetado y venerado, al mismo tiempo surge el miedo “A la castración”, es decir miedo a que el padre le remueva los órganos sexuales al niño, debido a que lo considera el órgano ofensor.
Si el desarrollo se da de forma normal, el niño renuncia a los deseos amorosos hacia su madre y en cambio se esfuerza por asumir el papel masculino imitando al padre, es decir el afecto que siente el hijo por la madre deja de ser de índole sexual. Esto ocurre debido a que el niño acepta la masculinidad del padre.
De lo contrario si cualquiera de los padres crea en el niño demasiada frustración o son excesivamente permisivos, al no proporcionarle una educación y un conocimiento adecuado durante este periodo clave, pueden ocurrir fijaciones graves, las cuales tendrán consecuencias a largo plazo.
Es aquí cuando usamos las famosas frases de complejo de Edipo superado o no superado, debido a las repercusiones que pueden tener en la vida adulta del menor.
Si lo anterior no se da de la manera correcta, es decir no se logra superar de manera adecuada el complejo de Edipo, el niño podría llegar a rechazar el papel masculino, o tal vez su conciencia se vea atrofiada, podría tener dificultades a la hora de relacionarse con mujeres de su misma edad, lo cual generaría que el niño desarrolle gusto únicamente por las personas mayores, el menor podría aprender a sobrevalorar sus habilidades sexuales y a llevarle a tomar una actitud arrogante y egoísta en sus relaciones con otras mujeres de cualquier edad.
Sí tú conoces algún amigo, algún familiar que tenga gusto por mujeres mayores, ahora sabes qué le sucede.
Cabe aclarar que los sentimientos e intereses sexuales del niño o la niña son aún bastante inmaduros y rudimentarios por lo que no tiene ninguna intensidad ni dirección a diferencia del amor físico y emocional característicos de una etapa adulta.
Complejo de Electra
De manera similar al complejo de Edipo, en el complejo de Electra las niñas ven a su padre como un objeto sexual y a su madre como su rival.
La niña al descubrir que no tiene pene vuelve más complicada la relación con la madre, debido a que la culpa de su pérdida, al mismo tiempo también ama a su madre, al igual que en el complejo de Edipo les hace tener sentimientos ambivalentes, la diferencia radica en que para la niña este conflicto nunca se ve resuelto completamente, lo cual según Carl Jung afecta de manera profunda la vida emocional y el desarrollo del súper ego en las mujeres.
El rasgo patológico principal que surge en esta etapa, es conocido como “Envidia del pene”, la cual hace referencia a que la niña minimiza el papel femenino y sobre valor el masculino, Freud pensaba que los conflictos de la etapa fálica generaban diversos trastornos de las funciones sexuales en la vida adulta, tales como la frigidez y la dismenorrea.
Al igual que como sucede con el complejo de Edipo, el mal manejo de la educación de las niñas durante este periodo puede provocar ciertos tipos de tendencias patológica de la personalidad.