Titulares como el de este artículo le han dado la vuelta completa al internet, y también se han hecho populares en revistas de negocios y mercadotecnia, debido a los supuestos efectos emocionales que tienen los colores en nosotros. Pero ¿Qué tan reales son todas estas afirmaciones? ¿Son un invento del marketing digital? El día de hoy, daremos respuesta a todas las preguntas.
La psicología del color
Hagamos un ejercicio mental: Imaginemos un paisaje lleno de vida, flora y fauna por doquier, acompañado de un cielo azulado perfecto.
Al leer la descripción anterior, han venido a tu mente ciertos colores, ¿verdad? El color verde en representación de la naturaleza, la vida, la paz y armonía, el azul del cielo como la tranquilidad e inclusive pudo haber venido a tu mente el color amarillo del sol, dando alegría a la escena (aunque este último no se haya mencionado en la descripción, y haya salido puramente de tu imaginación)
Ahora, repitamos el ejercicio de imaginación, sólo que ahora pensaremos en una escena con cielo nublado, a punto de tormenta, donde los animales corren a refugiarse entre árboles y rocas, y el sol desaparece lentamente ante el poderío de la luna.
La pregunta ahora es: ¿Con cual momento te quedarías? ¿Con la tormenta? ¿O con el día soleado? Aunque a todos nos gusta de vez en cuando escuchar el relajante sonido de las gotas de lluvia rebotando en el piso, estoy seguro de que si tuvieras que vivir alguno de estos dos momentos, preferirías estar en un día soleado, antes que mojarte en una tormenta ¿Por qué?
Mientras que en el primer ejercicio de imaginación evocamos una escena llena de colores, en la segunda descripción, se limitó únicamente a las palabras clave “nublado” “tormenta” y “noche”, las cuales relacionamos con colores grises, o bien, una oscuridad total, lo que a su vez nuestro cerebro enlaza con el aburrimiento, peligro, y un constante estado de alerta.
Las asociaciones de colores con nuestro estado de ánimo son la clave
Si hoy descubriera un nuevo color, y te diría que simboliza la tranquilidad, armonía y felicidad, tu cerebro automáticamente relacionaría esa tonalidad con todas las características mencionadas con anterioridad; y ahí es donde está el potencial de marketing de la psicología del color.
Actualmente sabemos que los colores sí afectan nuestro estado de ánimo, e incluso, nuestra conducta, pero no hay explicación certera del origen de cada una de las asociaciones: ¿Por qué relacionamos el color negro con lo formal, la autoridad, el peligro, la oscuridad, y el terror?, ¿No puede ser de otra forma?
Para explicar el origen, muchos han encontrado argumentos basados en la evolución humana, y cómo mediante estímulos visuales, nuestros antepasados relacionaron colores con situaciones de vida. Por ejemplo, al ver el color rojo, pudieron rápidamente relacionarlo con el peligro, la atención, y en última instancia, con la muerte, puesto que rojo es el color de la sangre. Aunque esta esta explicación resulta ser la más válida, aún existen muchas inconsistencias en la teoría, y haría falta investigar más para dar con la respuesta definitiva
Para concluir, daremos respuesta clara a las preguntas del principio:
¿Los colores determinan nuestra personalidad? Sí y no. No todos los amantes de los colores oscuros tienen tendencias a la depresión, o a estar tristes y enojados en todo momento, ni tampoco las personas que tienen a los colores cálidos como sus preferidos tienen una sonrisa de oreja a oreja 24/7. Son asociaciones (muchas veces inconscientes), que nuestro cerebro hace, que podrían determinar nuestro estado emocional en momentos precisos, pero, en definitiva, todo dependería en última instancia, de qué significado le quieras dar a un color. Si los colores oscuros para ti son relajantes y alegres, que así lo sean.
En artículos posteriores hablaremos sobre el significado de cada uno de los colores, y cómo estos son usados en el marketing en la actualidad ¡No olvides compartir este artículo para que más personas puedan informarse sobre los temas más relevantes del mundo de la psicología!