Justamente en un artículo pasado de nuestro blog, hablamos acerca de un nuevo trastorno en auge, tal y como las nuevas tecnologías están a día de hoy. Para infortunio de nuestra especie, el Tecnoestrés no es el único problema causado por la constante exposición a los bombardeos masivos de información por parte de las redes sociales y aparatos tecnológicos. Recientemente ha sonado fuerte un nuevo “síndrome” como lo han denominado por sus características, el cual se hace llamar FOMO (que significa desglosando sus siglas, “miedo a perderse algo”).
Claramente la detección de este nuevo síndrome está íntimamente ligada a la expansión de las redes sociales, y la información, eventos y contenido que existe dentro de ellas. Por tanto, los ejemplos más comunes que se dan a la hora de hablar sobre el FOMO son los de personas que les aterra (como si se tratara de alguna fobia) perderse eventos, información que es importante para ellos o simplemente no poderse conectar por largos periodos a internet o alguna red social (lo que al mismo tiempo significaría una adicción a la tecnología)
Y aunque ya es grave de por sí, aún falta lo peor de este trastorno
APRENDE: ¿Sufres de estrés por la tecnología?
¿Por qué mi vida no es interesante como la de los demás?
Con el crecimiento exponencial de redes sociales de estilo más personal como lo es Instagram, en la cual, cientos de miles de usuarios comparten fotografías del estilo de vida que tienen y otros tópicos como la moda, alimentación sana, etcétera…
Esto ha llevado a mucha gente que también es usuario de redes del mismo corte a pensar que su vida no es tan buena como la que tienen otras personas del mundo, desvalorizándose e incluso llegando a una depresión con consecuencias letales… Si les parece que fuimos muy drásticos, lo cierto es que con unos pocos clics podemos encontrar historias reales de esta situación.
El trastorno FOMO trata de explicar estas actitudes autodestructivas en los usuarios por medio de la personalidad o rasgos de los individuos; Normalmente los sujetos que son propensos a sufrir FOMO (u otros trastornos derivados), son aquellos con baja autoestima, inseguros de sí mismos, con notables rasgos ansiosos y nerviosos, lo que ocasiona que, o no puedan despegarse de la información proporcionada en las redes sociales, o bien no puedan dejar de pensar que su vida es una desgracia en comparación a los demás usuarios miembros de la red
Gracias a los estudios del Dr. Andy Przybylski se pudo determinar que el trastorno FOMO afecta en su mayoría a jóvenes, y entre estos, los hombres son los más afectados. La razón de ser de lo anterior es social, y está correlacionado a las imágenes implantadas en nuestras mentes como “ideales”. En las redes sociales podemos de encontrar miles de fotografías que retratan aquellos estereotipos creados por la sociedad, haciéndolos “reales”.
Sí, “Reales”
Pues solamente tratamos de proyectar lo que nos gustaría ser, y no lo que somos, y por tanto, muchas de las imágenes en internet sólo están fabricadas y solo reflejar una realidad idealizada, una sociedad de sueño. No obstante, y aunque esto sea así, las actitudes de inferioridad afectan a miles personas al día…
¿Sabías de la existencia del síndrome FOMO? ¡Cuéntanos!